jueves, 28 de mayo de 2020

Tolerancia ¿soportar al otro?


Anteriormente había escrito un artículo referente a la empatía. Hoy voy a hablar de la tolerancia y es que cuando hablamos de tolerancia en ocasiones se piensa que es tener que soportar lo que dice o como actúa el otro. ¿Pero es así esto? ¿Qué es realmente la tolerancia? Y aún más importante. ¿Cómo podemos ser tolerantes cuando no estamos de acuerdo de algo y sin perder nuestro enfoque y nuestra postura? Hoy voy a hablar un poco de esto y diferenciar cuando se debe ser tolerante sin reprimir las ideas y/o acciones que nos identifican.

Según la Real Academia Español la tolerancia se define como: “Respeto a las ideas, creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias a las propias.” Entonces en este sentido nos habla de “respeto” no de soportar. Cuando somos tolerantes no significa que admitimos que el otro tiene la razón o que estamos equivocado.

Hay un pequeño error que se comete cuando tratamos de ser tolerantes y en el proceso nos tragamos o reprimimos nuestras ideas. Ya sea por no querer lastimar al otro o pensar que el otro está en su entera razón.  

Entonces, ¿Cómo podemos tolerar sin lastimarnos? Volvemos nuevamente al punto. Tolerar se basa en respetar las ideas de los otros. No necesariamente aceptarlas, podemos tener diferencias en las ideas de culto. Por ejemplo, que alguien tenga creencia en Dios y el otro simplemente en nada.

No significa esto que Dios no exista o que las persona siga una idolatría impuesta por un gran imperio en el que sea convertido el vaticano. Donde tienen a las personas en un letargo, donde la religión es el opio de la sociedad. O que el otro sea en satánico que se quemará en las pailas del infierno porque está blasfemando. Y cree en una ciencia que es imperfecta y se basa en los pensamientos del otro o crea en existencia alienígena y este loco, totalmente orate.

No significa que si hay una diferencia política donde uno sea de izquierda y el otro de derecha. Entonces el de izquierda siga ideologías que solo beneficiarán a un grupo de preferenciales. O de parasitarios que vivirán del estado y retrasen el progreso en su lucha del tumbar el capitalismo mientras en el proceso crean un monopolio. O que el otro sea un fascista que está a las órdenes del imperio y que busca solo beneficiarse él en el proceso del explotar al otro.

El punto con la tolerancia es que si puede haber diferencias y hay que aceptar que el otro piensa así y hay que respetar las diferencias. No podemos utilizar esto para humillar o desprestigiar al otro. Porque como hay que respetar las ideas y esperamos que nos respeten las ideas. Como diría el dicho “no hagas lo que no te gusta que te hagan”. Igual en el proceso debemos respetar al otro como persona.

Sin embargo, vamos a otro punto. ¿Qué sucede cuando las acciones del otro nos afectan directamente? ¿Qué pasa cuando la tolerancia llega a un punto de irrespeto? ¿Debo aguantar para seguir tolerando? ¿Soportando humillaciones, vejaciones, entre otras cosas? La respuesta es ¡NO!

La medula espinal, la base, la estructura de la tolerancia se basa en el RESPETO. Y hay un dicho que dice “mis derechos empiezan cuando terminan los tuyos”. Entonces cuando llega el irrespeto es allí donde tienes que reclamarlo. Donde la tolerancia termina, y donde la empatía está relativamente sostenida.

Ya en este momento no se trata de aguantar, se trata de reclamar respeto. Hay que dejar de reprimir las cosas y decirlas como mejor se parece. Porque cuando reprimimos nos hacemos daños a nosotros mismo. La forma en que se reclama el respeto ya es otra cosa, empero si respetas debes ser respetado y a la inversa.

Ahora ¿Cómo tratar de ser buenos tolerantes? Date cuenta que en la diversidad de pensamientos e ideas se basa la divinidad de la vida. ¿Te imaginas lo aburrida que sería la vida si todos pensáramos iguales? Entonces agradece que existe esta diversidad de ideas. ¿Sabes cuánto ha cambiado el mundo gracias a que alguien pensó distinto? Hubo un momento en que se dejó de pensar que las posesiones demoniacas no eran realmente eso y en verdad eran problemas mentales. Allí comenzó la psiquiatría.

El hecho de que todos pensamos diferentes es lo que permite que evolucionemos. Por el contrario, cuando todos pensamos iguales o mantenemos una misma ideología y la hacemos crecer con radicalismo entonces nos quedamos atascado. ¿Te gustaría aprender de todo o solo quedarte con una sola opción? ¿te imaginas dar varias respuestas a una misma pregunta?

¿Cómo llego el ser humano a la tierra? Podrías decir. Los creo Dios o la evolución poco a poco nos fue formando. O decir que llegaron seres alienígenas que a traves de ingeniería genética nos crearon o que somos los hijos de grandes titanes. Entre otras cosas que podrían dar respuesta.

Entones ¿Porque ponernos en contra de alguien que piensa diferente? más bien. Podemos aprender de ellos o enseñarles (dependiendo del caso). Realizando un debate enriquecedor donde al final ambos pueden mantener sus ideas. empero aprendieron algo distinto, otra forma de ver el mundo e inclusive pueden crear una tercera idea donde se unan las dos anteriores. (partidos de izquierda y derecha trabajan juntos, aunque ante las cámaras se pelean).

Quizás el problema no es tolerar las ideas, las personalidades o las actitudes. Quizás el gran problema es intentar tolerar las acciones cuando están nos afectan. Y como lo dije anteriormente allí ya no cabe tolerancia. Puede que se tenga un poco de empatía (dependiendo del caso) y de allí llegar un poco a la tolerancia.

La empatía y la tolerancia son palabras que casi siempre van de la mano. Porque en ocasiones una nos lleva a la otra. Pongamos un ejemplo: hay poco presupuesto para realizar compras de alimentos el caballero piensa en comprar granos y carne que rinden más. Tiende dar sensación de pesadez y tiene gran contenido de proteínas para la masa muscular. Mientras que por su parte la mujer piensa en comprar pescado y pollo porque considera que son más nutritivos y puede mantener su figura.

El hombre detesta el pescado, tener que quitar las espinas y todo eso. La mujer considera que tiene muchos carbohidratos y puede hacerla engordar. ¿Qué se puede hacer? Porque en este caso no se están lastimando en sí. Lo importante es comer ¿no? Aquí hay una pelea de ideología de conocimientos y de preferencia. Podemos pensar que el hombre puede sacrificar un poco sus cosas por un momento hasta que exista más capital y luego satisfacerse. O pensar en que la mujer sacrifique su figura y luego bajarla con ejercicios.

Independientemente de lo que consideres allí entra la tolerancia y la empatía. Puedes sentirte empático con uno de los dos y tener tolerancia a alguno de los dos. Pero ¿y ellos? ¿Qué pasa si además añadimos que ambos son orgullos y no quieres dar su brazo a torcer?  Nadie se está negando la comida. Comprendamos un poco más el contexto. Todo tiene carbohidrato carne, granos, pescado o pollo, por su parte el pescado tiene más proteína que la carne e incluso hasta la pechuga de pollo tiene más proteína. ¿Quizás que rinde más? O ¿Qué es más económico? Allí está el dilema.

El problema en si es el capital en este sentido podemos pensar que hay que buscar lo que es más económico ser más ecuánime y buscar lo que rinda más. En este sentido, hay que ser empático para llegar a la tolerancia ya sea por el hombre o por la mujer cualquiera de los dos tendrá que ceder siendo primero comprensivo, luego empático y luego tolerante. Una cosa lleva a la otra y para llegar a eso debes eliminar el orgullo.

Ser tolerante como empático no es inalcanzable, empero tampoco sencillo. Debe ser paciente y conocedor del contexto, entender lo que está alrededor para llegar a una conclusión. No se trata de aguantar se trata de aprender. Quizás difieras o tengas experiencias o técnicas que te gustaría comentar espero leerte y recuerda que en Pomum cualquier cosa puede ser escrita.

No hay comentarios:

Publicar un comentario